A decir del fiscal del estado, el arma fue usada el 16 y el 23 de octubre de este año en la ciudad de Uruapan

Redacción / La Voz de Michoacán

Morelia, Michoacán. La pistola con la que Víctor Manuel “N” dio muerte al presidente municipal de Uruapan, Carlos Manzo, ya había sido usada previamente en distintos ataques armados en la ciudad de Uruapan, dio a conocer este miércoles Carlos Torres Piña, fiscal General del Estado.

Al mediodía de este jueves, en conferencia de prensa encabezada por Omar García Harfuch, secretario de Seguridad y Protección Ciudadana del gobierno federal, se dio a conocer que ya había sido detenido en la colonia Centro de Morelia Jorge Armando “N”, alias El Licenciado, un autor intelectual del homicidio del presidente municipal de Uruapan, cometido el 1 de noviembre.

Durante las investigaciones y los respectivos peritajes, se determinó que el arma usada por Víctor Manuel “N”, una calibre .9 milímetros, está relacionada con dos carpetas de investigación de la Fiscalía General del Estado, informó Carlos Torres Piña.

A decir del fiscal del estado, el arma fue usada el 16 y el 23 de octubre de este año en la ciudad de Uruapan.

Según los reportes que esta casa editorial tiene de hechos violentos registrados en esa ciudad en las fechas señaladas, el 16 de octubre, a las 12:00 horas, varios hombres armados llegaron a una barbería ubicada en la calle Plan de Ayutla esquina con Agave, en la colonia Tierra y Libertad. Ahí, descendieron de la camioneta en la que llegaron y abrieron fuego contra dos hombres, los cuales perdieron la vida en la escena del crimen.

Ya el 23 de octubre, a las 15:30 horas, en la calle Prolongación Gran Parada, en la colonia Ferrocarrilera, cerca del Paseo Lázaro Cárdenas de la ciudad de Uruapan, sujetos armados llegaron a un negocio a bordo de una motocicleta y dispararon contra una pareja. En el ataque, la mujer recibió un balazo en una pierna y fue canalizada por paramédicos a un hospital, en tanto que el varón, el cual presentaba heridas graves, fue llevado por sus familiares a un nosocomio, . Él fue identificado como Marcos Alejandro P.

El arma en cuestión coincide con los casquillos encontrados en ambas escenas del crimen y los recolectados tras el asesinato de Carlos Manzo, aunque Carlos Torres Piña no precisó si en los tres hechos la usó la misma persona.