Morelia, Mich. | Agecia ACG.- Ante el asesinato de Carlos Manzo, presidente municipal de Uruapan, y los llamados en redes sociales para que el gobernador Alfredo Ramírez Bedolla presente su renuncia, el mandatario admitió que “es normal” la indignación ciudadana y celebró que la mayoría de las manifestaciones han sido “pacíficas”.
En conferencia de prensa, donde presento los ejes del Plan Michoacán, señaló que su gobierno se mantiene “atento” y “coordinado” con la Fiscalía General del Estado de Michoacán para avanzar en las investigaciones y garantizar que se haga justicia.
Ramírez Bedolla sostuvo que su responsabilidad como servidor público lo mantiene abierto a la crítica y consciente de la exigencia de resultados tras este tipo de hechos.
Aseguró que su prioridad es la paz para la entidad, en “coordinación plena” con el gobierno federal, y apuntó que desde el primer día su administración está vinculada con la investigación del homicidio, así como con la atención a las comunidades afectadas.
El gobernador enfatizó que el plan estatal para construir paz no solo busca atender este caso puntual, sino también fortalecer las estructuras de seguridad, procuración de justicia y desarrollo social. “Estamos trabajando para que haya justicia, y eso es lo que nos debe mover y motivar”, subrayó.