El sistema penal acusatorio permite que delincuentes queden libres, afirma Bedolla, quien busca reformas para proteger a las víctimas.
Morelia, Michoacán.- El gobernador de Michoacán, Alfredo Ramírez Bedolla, atribuyó la caída de procesos penales y la permanencia de delincuentes en libertad a las deficiencias del sistema penal acusatorio, particularmente a la exposición de víctimas y denunciantes durante los juicios, lo que provoca el desistimiento de denuncias en etapas clave.
Durante su rueda de prensa de los lunes desde Casa Michoacán, el mandatario estatal explicó que la experiencia de Michoacán en delitos como la extorsión evidencia que “no se logra llegar a la acción de sentencias condenatorias porque durante el proceso el denunciante, la víctima, queda expuesta ante los probables delincuentes que han sido denunciados”.
Detalló que el temor generado en las víctimas deriva en que, al llegar a las etapas probatorias del juicio oral, éstas desistan de sostener su denuncia.
“Y en ese momento todo el esfuerzo de procuración de justicia queda hecho a un lado. Se caen los casos y los delincuentes siguen libres”, señaló.
Aclaró que esta problemática es consecuencia directa de la reforma penal acusatoria implementada hace más de una década, al homologar el sistema mexicano al modelo estadounidense sin considerar el contexto nacional.
“Esto ha sido un fracaso rotundo, total”, expresó.
Indicó que antes de dicha reforma bastaba con que la víctima presentara la denuncia ante el Ministerio Público, instancia que tenía la potestad de otorgarle valor probatorio.
Sin embargo, actualmente, dijo, “el denunciante o la víctima tiene que estar constantemente sosteniendo su denuncia, sosteniendo su declaración ante el juez”, quedando expuesta su seguridad.
Ante este escenario, el gobernador anunció que su administración impulsa una reforma al Código Nacional de Procedimientos Penales para incorporar la figura de la “víctima con identidad reservada”, especialmente en delitos de extorsión y delincuencia organizada.
“El mensaje es ponernos del lado de la víctima, del lado del denunciante”, subrayó, al insistir en que la denuncia debe ser un mecanismo de protección y no “un dispositivo de exposición ante los delincuentes”.
Finalmente, explicó que la propuesta busca garantizar sentencias condenatorias efectivas y avanzar hacia la “cero impunidad en los delitos penales”, mediante una mayor protección a quienes denuncian.
